Próximamente, llega una de las épocas vacacionales más importantes del año. Para disfrutar de ellas en toda su plenitud, tu vehículo ha de estar preparado para que tu viaje sea cómodo y seguro. Al fin y al cabo, a nadie nos gusta que nos dé problemas o nos deje tirados en mitad del trayecto. Pero, ¿sabes realmente cómo preparar tu coche para viajes? A continuación, te mostramos lo que tienes que dejar listo y en buen estado para minimizar al máximo los inconvenientes en carretera.
Consejos para evitar averías en el viaje
La Semana Santa está cerca. Sin duda, este es un momento ideal para viajar, disfrutar de esta festividad y desconectar de la rutina. No obstante, una avería en tu coche podría estropear todos tus planes, así como buena parte de la diversión. Para prevenir esta situación, necesitas efectuar una puesta a punto adecuada y actuar con suficiente previsión.
El estado de los neumáticos
Los neumáticos son el único elemento del coche que está en contacto con la carretera. Por lo tanto, que estén en buen estado es una obligación. Es la primera parte que tienes que revisar antes del viaje de Semana Santa. Comprueba que el dibujo de la rueda tiene una profundidad de dos milímetros y que no presenta signos de desgaste.
La presión es otro factor que has de comprobar. Si esta no es la adecuada, el riesgo de sufrir un accidente aumenta. Procura que la rueda tenga una presión ajustada a las indicaciones que dicta el fabricante. Además, las altas temperaturas podrían afectar de manera negativa, por lo que revisa la meteorología de la zona que vayas a visitar.
El motor
Este es el corazón de tu vehículo. Si se produce una avería, tienes muchas posibilidades de que termine tu viaje y tengas que afrontar una reparación cara. Así pues, presta atención al estado del aceite, tanto en su nivel como la calidad del mismo. Para ello, solamente tienes que observar la varilla del motor para enterarte de su estado. Esta cuenta con una serie de muescas que te indicarán si existe la cantidad adecuada.
Además, el color te muestra si se encuentra o no en buen estado. Ante cualquier síntoma de que no esté bien, debes cambiarlo o ajustar el nivel para que sea óptimo. Así, el motor contará con todo el lubricante que necesita para cumplir con su función sin problemas.
Comprobación del sistema de luces
Las luces muestran tu posición a otros conductores y te permiten ver tanto de noche como con niebla. Una revisión ocular bastará para comprobar si emiten suficiente luz. En caso de que parpadeen o no enciendan, cámbialas de inmediato. De lo contrario, no solo pierdes seguridad en carretera, sino que acabarás con una multa.
Otro factor importante es su altura y posición. Deben estar en el punto adecuado para no deslumbrar a otros conductores y garantizar tu correcta visión. Ve a tu taller de confianza para que comprueben su estado. Así, saldrás de dudas y disfrutarás de un viaje completamente seguro. También pueden revisar el buen estado del sistema eléctrico.
¿Funcionan bien los frenos?
Tanto para recorridos largos como cortos, los frenos han de estar en perfecto estado. Para garantizar su funcionamiento, examina el nivel del líquido de frenos. Junto a esto, el propio disco y las pastillas deben permanecer en buen estado. Si estuviera desgastado o presentara daños, tendrás que cambiarlos ante de partir.
Otras piezas de obligada revisión son los amortiguadores del coche, ya que afectan al desempeño de los frenos. Son la garantía de una buena estabilidad en carretera, pero también dan una mayor distancia de frenado. Por lo tanto, ambos sistemas deben estar en un buen estado. Así, en caso de transitar por una carretera dañada, el vehículo no sufrirá daño alguno.
Los limpiaparabrisas
La primavera no ha hecho más que empezar cuando se inicia la Semana Santa. Las lluvias aún son comunes en buena parte del país, por lo que necesitas unos parabrisas en buenas condiciones. Presta atención al estado de las escobillas, las cuales deben retirar el agua y la suciedad por completo. A su vez, rellena el líquido para limpiar la luna delantera y revisa que no haya obstrucciones en el punto de salida.
Por descontado, el movimiento de los limpiaparabrisas tiene que ser fluido a todas las velocidades. En caso de lluvia intensa, los vas a necesitar a pleno rendimiento. Si presentasen daños o síntomas de un desgaste acusado, cámbialos para evitar futuros problemas. De este modo, viajar en Semana Santa con vehículo será una experiencia que recordarás durante los próximos años.
Una vez llegados a este punto, seguro que ya conoces cómo preparar tu coche para viajes. En estas situaciones, la mejor decisión es llevar tu vehículo a un taller de confianza para garantizar tu seguridad en carretera. Además, no te olvides de contar con un seguro de automoción, ya que, en caso de que surjan problemas, tendrás asistencia en carretera y remolque del vehículo sin límite de kilómetros, asistencia legal, asistencia médica, traslado sanitario y repatriación, y cobertura de vehículo de sustitución.