Imagina que te vas de vacaciones unos días con el objetivo de hacer senderismo. Por ejemplo, para realizar el Camino de Santiago durante unas semanas. Muchos excursionistas poco profesionales se han lamentado por no haberse preparado suficiente con antelación. He aquí algunas preguntas que deberías hacerte antes de embarcarte en tu aventura.
- Habilidades físicas
Tienes que tener en cuenta cuál es tu experiencia realizando senderismo. ¿Cuántos kilómetros tienes a tus espaldas? ¿En qué condiciones? ¿Cuál es tu resistencia? ¿Crees que serás capaz de soportar una mochila pesada durante varios días?
Consejo: Si estás planeando una larga caminata, te recomendamos que te prepares físicamente para caminar durante unos días consecutivos con una mochila pesada.
- Salud
¿Está siguiendo un tratamiento médico que te impida hacer grandes esfuerzos (por ejemplo, diabetes, asma o problemas cardiovasculares)? ¿Tienes algún tipo de alergia, como a las picaduras de insectos? Estar prevenido es fundamental para evitar peligros innecesarios.
- Motivación
No solamente es importante la preparación física previa antes de emprender la marcha, también es necesario estar motivado. Superar limitaciones es una gran experiencia; el objetivo es que todo el mundo mantenga la moral durante todo el trayecto.
Un buen líder de grupo siempre tiene en cuenta las especificidades de las motivaciones y expectativas de cada miembro del equipo antes de hacer frente a una situación difícil.
- Caminar solo
No es recomendable. Ten en cuenta que si tienes algún problema es mejor ir acompañado ante una urgencia. Por supuesto, es totalmente recomendable no salir de casa sin un buen seguro de viaje.
Foto I juanpol en Flickr